Que el juego favorece el aprendizaje, y la motivación y el interés por el conocimiento, no es ninguna novedad. En España es creciente el número de escuelas que han apostado en los últimos años por incluir el juego como herramienta pedagógica de primer orden para favorecer el aprendizaje, más allá de los primeros años de infantil.

No obstante, mientras nuestros vecinos europeos fomentan el juego libre hasta los 7 años y mantienen una estrecha vinculación entre juego y enseñanza a lo largo de primaria y secundaria, en España la distinción entre ambas es taxativa y era raro conocer a escuelas con proyectos innovadores más allá del ciclo infantil.

Pero la realidad está cambiando y la IV edición del concurso “El Juego en la Escuela” impulsado por el Observatorio del Juego Infantil en colaboración con la Fundación Crecer Jugando nos muestra que el juego ya no es una actividad complementaria de las escuelas, sino el vehículo a través del cual articular la enseñanza de las diferentes materias, permitiendo además aunar diferentes edades y capacidades, descubriendo las motivaciones y el potencial de cada alumno. La participación en este concurso ha aumentado el 112% desde la primera edición.

De hecho, los niños que juegan muestran mayor predisposición para la enseñanza. Así lo demuestran diversos estudios, como los recientemente publicados en la revista americana “Pediatrics”. Una afirmación en la que también coinciden los expertos del Observatorio del Juego Infantil, que destacan la importancia de introducir el juego y el juguete en el currículo escolar para fomentar el aprendizaje, despertar la curiosidad de los alumnos y conseguir mayor motivación.

Juego y aprendizaje para todos

Desde las aulas de educación primaria hasta los programas de Cualificación Profesional Inicial Especial (PCPIE) con alumnos de entre 18 y 21 años, pasando por las aulas de Educación Especial, los proyectos en los que el juego es una herramienta imprescindible en el aprendizaje responden a diversas perspectivas de la educación, facilitando los procesos de aprendizaje.

A través del juego se hace al alumno protagonista de su propio proceso de aprendizaje ofreciéndole un papel activo. El juego se convierte en un pilar fundamental en el aprendizaje para alumnos con necesidades especiales ya que permite captar la atención de estos niños; y en centros donde existe una gran cantidad de alumnos inmigrantes el juego fomenta la integración. Además, la introducción del juego en las aulas produce la mayor implicación de la familia en el aprendizaje, ya que en muchos proyectos se cuenta con la participación en las actividades propuestas de los padres y abuelos.

Colegios innovadores

Son muchas las escuelas que cuentan entre sus proyectos educativos con el juego como recurso pedagógico. 36 de ellos han participado en la IV edición del concurso “El Juego en la Escuela” presentando sus proyectos para que los miembros del Observatorio del Juego Infantil, que ha actuado como jurado, distinga como ganadores a tres de ellos.

Por Comunidades Autónomas, Andalucía, con un 19.4% de la participación en el concurso, presenta el mayor número de escuelas con proyectos de este tipo. Le siguen de cerca Aragón (16.6%) y Cataluña (13.8%). También Castilla La Mancha supera los dos dígitos con un 11.1% de la participación.

Los proyectos ganadores han sido:

Jugando aprendo a hablar, del Colegio Sagrada Familia de El Entrego (Asturias). La experiencia se ha llevado a cabo en aulas de Educación Especial dando respuesta a alumnos con necesidades educativas especiales de educación infantil y primaria en el área del lenguaje.  Su principal objetivo ha sido estimular la comunicación y el lenguaje, y rehabilitar cuando en la adquisición o el desarrollo se presentan alteraciones Para ello han utilizado juegos y juguetes de elaboración propia y juguetes ya existentes.

Descubro mi mundo: ¿De dónde vienen los juguetes?, del Colegio Rural Agrupado Los Regajales en la provincia de Ávila. Esta escuela reúne cuatro localidades, Nava de Arévalo, Tiñosillos, San Vicente de Arévalo y Cabezas de Alambre. La experiencia se ha llevado a cabo en un aula mixta con alumnos de entre 3 y 7 años enmarcada dentro del Aprendizaje Basado en Proyectos, cuya principal característica es la transversalidad, por lo que trabajan todas las áreas del currículo. El objetivo ha sido fomentar competencias matemáticas, científicas, tecnológicas, lingüísticas, sociales, culturales, artísticas y el espíritu emprendedor.

-El ladrón de Juguetes, del CEIP Bilingüe Jose Ramón Villa de Mora (Toledo) en el que se han tratado todas las áreas del currículo de forma globalizada. Una experiencia que se ha desarrollado en el ciclo de Educación Infantil y que ha permitido potencias la autonomía personal, la interacción con el entorno y la comunicación de los alumnos. Además, la familia ha participado de forma activa en este proyecto con actividades en las que los abuelos enseñaban nuevos juegos a los alumnos.

Como ganadores, los tres centros recibirán un lote de juguetes para equipar sus aulas de juego gracias a la colaboración de las empresas jugueteras: Bizak, Claudio Reig, Diset, Educa Borras, Fábrica de Juguetes, Falomir Juegos, Famosa, Hasbro, Juguetes Cayro, Mattel, Miniland Educational, Playmobil y Vtech.

Puedes encontrar los proyectos ganadores en la web del Observatorio del Juego Infantil: http://www.observatoriodeljuego.es/category/recursos-iv-concurso-el-juego-en-la-escuela/